Terminología común del alojamiento web o hosting

Necesitas con urgencia un servicio de hosting pero tienes serios problemas debido a que la terminología de esta temática es algo compleja. No te preocupes, alrededor del mundo existen muchas personas que, al igual que tú, se hacen exactamente las mismas preguntas en cuanto se encuentran con los términos que normalmente se utilizan a la hora de definir un alojamiento web.

Por este motivo, en el artículo de hoy intentaremos explicar los términos comunes del alojamiento web, para que puedas tomar una mejor decisión a la hora de elegir un servicio de hosting u otro.

¿Por qué es necesario conocer los términos comunes del Hosting web?

Si nuestra intención es abrir una página web para tener presencia en Inernet, una de las principales razones por la que es necesario conocer, al menos de manera superficial, la terminología común del Hosting Web, es poder hacerse una idea sobre tipo de servicio que se va a ajustar mejor a nuestras necesidades.

Y es que cuando no se tiene la menor idea de en qué consiste algo, se cae fácilmente en el error de comprar o adquirir productos y servicios que no satisfacen las necesidades que podemos tener.

Términos comunes del alojamiento web

Estos son los términos más comunes que se utilizan a la hora de definir un servicio de hosting:

• Ancho de banda: el ancho de banda es la parte de un servicio de alojamiento web que determina la velocidad de descarga de nuestro sitio web y el número de usuarios concurrentes que pueden acceder a la misma sin bloquearla. A mayor ancho de banda mejor y más caro será el hosting.
• Servidor: el servidor es el ordenador donde se alojan los diferentes ficheros relacionados con uno o varios sitios web representados por uno o varios nombres de dominio. En pocas palabras, es la máquina que permite acceder a las páginas de Internet que se encuentran alojadas en ella. Cuanto mayor sea la capacidad de almacenamiento y procesamiento del servidor, más tendremos que pagar por él.
• Dominio: es el nombre de nuestro sitio web (por ejemplo, www.misitio.com). El primer paso para acceder a un servicio de hosting es registrar un nombre de dominio. El dominio es, por así decirlo, la dirección de nuestro sitio web, ya sea una página web, un blog o una tienda online.
• Registrador de dominios: los registradores de dominios son empresas que permiten registrar nombres de dominios de Internet y que normalmente también ofrecen servicios de alojamiento web.
• Hosting: la palabra hosting, traducida al español, significa alojamiento. Esta palabra se relaciona con el espacio que utiliza nuestro sitio o sitios web en el servidor.
• Hosting gratuito: existen empresas que ofrecen alojamiento gratuito a cambio de poner publicidad en nuestras páginas u otro tipo de contrapartida no monetaria. Suelen ser servicios que no ofrecen soporte al cliente y de baja capacidad, tanto en tamaño de almacenamiento como en ancho de banda.
• Hosting compartido: son servicios de alojamiento por los que se paga un precio bastante económico al compartir un mismo espacio y servidor con muchas otras páginas web, compartiendo velocidad de procesamiento, ancho de banda, y espacio en disco.
• Servidores dedicados: este tipo de servicio de hosting es el adecuado si nuestro sitio web va a soportar mucho tráfico o si pretendemos alojar un gran número de páginas web. El servidor sólo lo utilizaremos nosotros, bien sea porque lo hayamos alquilado o directamente comprado.
• Hosting reseller: Así se conoce a aquellos emprendedores que se hacen con un alojamiento web para posteriormente ofrecer servicios de alojamiento web a terceros. La estrategia consiste en alquilar un hosting para luego dividirlo y alquilar los distintos “cachos” a diversos usuarios (ver el artículo ganar dinero con los servicios de hosting).
• SSL: estas siglas, se usan mucho en las tiendas online, es un certificado que te indica que puedes comprar y realizar transacciones con tarjetas de crédito de forma segura, todo ello gracias a la utilización de un sistema de encriptado de datos.
• Cpanel: es una herramienta con la que vienen la mayoría de los servicios de alojamiento web y que permite el control de los dominios y la información que se tiene en el servidor de hosting que estamos utilizando.

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